La lista de la compra: ¿producto artístico?

La retórica en la creación y venta de un producto. Vender humo.

En ocasiones, en esas interminables colas de los cajeros de los supermercados me dedico a observar que es lo que lleva en el carrito la gente. Me parece que su lista de la compra dice mucho de ellas. Examino que productos llevan, que marcas y los asocio según la edad que tienen, la apariencia…

Puede que esta afirmación resulte excesiva pero en mi opinión la lista de la compra es un retrato de la persona que compra, están en ellas sus gustos, sus necesidades., y ya incluso adentrándonos en otra dimensión me atrevería en decir que encuentro en ellas en cierta medida también sus deseos, anhelos…

-Lambrusco

-helado

-pechuga

-nata

-roquefort

(Lista hallada en el suelo del supermercado “Bon Preu” de la calle Rossello en Barcelona. Letra en verde sobre post it amarillo)

Esta lista es de una persona desconocida, ajena, un sujeto a parte que tiene toda una vida. La venta de esta lista es una perversión a su intimidad. Pero es arte, a medida que nos invita a pensar y a reflexionar.

Puede ser que esta persona haya acudido al supermercado en un estado de nerviosismo eufórico, quizás haya invitado a cenar a alguien especial . Quizás es la primera cita de una larga relación. Puede ser una celebración, un aniversario, un ascenso pero también un desengaño, un fracaso…

Podemos hacer mil hipótesis en eso consiste el arte en hacer mil hipótesis. En descubrir con que intención esta hecho un producto y cual es nuestra lectura.

Comprando esta lista hacemos hueco en nuestra vida a los sueños, alegrías, miedos, de esta persona anónima podiendo reflejar tambien nuestras alegría y nuestros fracasos en ella.